domingo, 25 de enero de 2015

Día de revisar bibliotecas ajenas

Foto: Brian9000 via photopin cc

Es curioso cómo funcionan los libros para meterse en la mente de alguien. Un libro solo sirve para que el escritor se meta en la del lector, le diga qué pensar por un rato. Varios libros del mismo autor sirven para lo contrario: es el lector el que se asoma cada vez más a la mente de quien escribe. Una biblioteca permite que otros nos metamos en la cabeza del dueño sobre qué piensa, qué le gusta pensar, de dónde vienen muchas de sus ideas. Si un escritor que hemos leído nos muestra su biblioteca, es como si hiciera un strip-tease intelectual,

25 palabras de yapa

Jaque mate. Papá sonríe como con culpa. "Perdón". Ta, respondo. Buster Keaton, un poroto a mi lado, queridos. ¿Y ahora qué vas a hacer?, pregunta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario